miércoles, 5 de diciembre de 2012

Dónde está la gracia

Por el blog Contando estrelas me entero del enésimo ataque a los católicos perpetrado desde un canal de televisión, en concreto La Sexta. [En realidad se emitió desde Antena 3, como me rectifica el autor del blog, Elentir. Ver los comentarios a esta entrada.] Dado que esta ha sido absorbida recientemente por Antena 3, el autor del blog secunda la "huelga de audiencia" contra todos los medios del grupo de comunicación. No me parece muy atinado un boicot tan genérico. ¿Qué culpa tiene, por ejemplo, Carlos Herrera, que trabaja en Onda Cero, de los contenidos de un programa de una de las televisiones pertenecientes al grupo del señor Lara? Pero no quería hablar de esto, sino ir a la cuestión de fondo.

Les resumo rápidamente la mamarrachada. En el programa del canal citado, "El hormiguero", el humorista (?) Leo Bassi se dedica a mofarse de la Iglesia Católica, anunciando la fundación de una nueva religión llamada patolicismo, que girará en torno al culto a un patito de goma. Hasta aquí, simplemente no le veo la gracia. (En este sitio se puede ver el vídeo.) Es todo indeciblemente más vulgar que la patafísica inspirada en Alfred Jarry, pero la cosa no merecería mayor comentario. Sin embargo, no contento con esto, Bassi se interna decididamente en el terreno del mal gusto, invitando a los espectadores a acudir a la ceremonia "patólica" de una boda entre una mujer y una perra, para recrearse en el carácter zoofílico y lésbico (sic) del acto. Todo ello parece una parodia del sectarismo laicista elaborada por su peor enemigo. La pregunta que surge inevitablemente es: ¿Por qué esa furia anticlerical y anticatólica tan destemplada? Y solo me cabe una respuesta: Bassi está absolutamente convencido de que el catolicismo, además de equivocado, es una perfecta estupidez. Y para pensar esto, tiene que ser bastante estúpido uno mismo.

Personalmente, estoy convencido de que ciertas ideologías, como por ejemplo el socialismo, o ciertas religiones, como por ejemplo el islam, son erróneas. Pero nunca se me ha pasado por la cabeza que sean estúpidas. En todo caso, pueden ser estúpidos algunos entre quienes creen en ellas. ¡Incluso hay idiotas que defienden por accidente ideas acertadas! Por supuesto que existen argumentos inteligentes contra el cristianismo, lo que no significa que estén en lo cierto. Pero quien elabora o repite un argumento estúpido contra algo, inevitablemente se comporta como un tonto, tanto si ese algo es verdad como si es falso. Si lo primero, porque yerra; si lo segundo, porque perjudica su propia causa, al comprometerla con argumentos falaces. Naturalmente, no se trata de elevar las obscenidades de Bassi a la categoría de argumentos. Son simplemente estupideces de pésimo gusto, que más bien deberían tener el efecto de avergonzar a cualquier laicista. Por eso no creo que sea necesario ningún boicot, ni siquiera a "El hormiguero". Se lo hacen ellos solitos.